La intención de Rosales es, aseguran en su entorno, “respetar y cuidar al personal, transmitir tranquilidad y comenzar un nuevo plan de negocios, sumando nuevos canales de ventas.
Hace meses, los dueños de la cadena de electrodomésticos comenzaron a negociar un quite de deuda con sus proveedores que hasta ahora no se transparentó. Fuentes del sector indican que las fábricas estarían dispuestas a recortar, en promedio, alrededor del 35% de sus acreencias.
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